En el valle de Cheddar, Inglaterra, nació en el siglo XII uno de los quesos más conocidos y exquisitos del mundo, el cheddar. Este queso se derrite muy fácilmente, lo que hace que el cheddar en lonchas sea un excelente complemento para sándwiches y hamburguesas . Además, el cheddar rallado funciona bien derretido en alimentos como macarrones con queso y papas al horno.